1902:

Con el objeto de responder a las necesidades de la niñez desamparada, la Iglesia Evangélica Metodista, presente en Argentina desde 1836, se propone constituir un orfanatorio. Cuenta para ello con la decisiva y generosa ayuda de Nicolás Lowe (1827-1902) y de su esposa Anita Froggatt (1822-1902), vecinos muy destacados en la memoria histórica de la ciudad bonaerense de Mercedes.

1904:

Comienza el servicio efectivo del Orfanatorio, en las instalaciones del “Instituto Nicolás Lowe”, una escuela diaria que había sido fundada en 1897 por iniciativa de los esposos Lowe. Paralelamente, se desarrolla un proyecto y campaña de reunión de fondos para la construcción de un edificio más amplio y adecuado, en terrenos donados para tal fin por el matrimonio.
 
1922:

Se inauguran las nuevas instalaciones de Mercedes. Aunque concebido originalmente como un “orfanatorio”, el proyecto fue evolucionando al ritmo de los cambios tanto en las problemáticas de la niñez en riesgo, como en la concepción y modos de abordaje para su atención, hasta transformarse en el actual Hogar Convivencial Nicolás Lowe para Niños, Niñas y Adolescentes.
 
1966:

Nace la Asociación Amigos del Instituto Lowe (A.A.D.I.L.).Es una agrupación de voluntarios que colaboran de múltiples maneras, incluida la obtención de fondos para contribuir al sostén de la obra.
 
1991:

 Por decisión de su XXIIª Asamblea General, la Iglesia Evangélica Metodista Argentina da origen a la Fundación Filantrópica Nicolás Lowe, que obtiene su personería Jurídica como entidad civil sin fines de lucro al año siguiente. Desde entonces se hace cargo del sostén y administración del Hogar Nicolás Lowe y de los que pudieran crearse en el futuro, propiciando una ayuda técnica, eficiente, actualizada y cristiana a la niñez abandonada o víctima de violencia.

2000:

Se abren las puertas de un segundo espacio de servicio, el Pequeño Hogar de Villa Sarmiento, ubicado en el partido de Morón, Provincia de Buenos Aires.

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2005:

 Se sanciona la Ley 26.061 de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, derogando la anterior Ley de Patronato de Menores, vigente desde 1919. La nueva ley cambia por completo la forma de concebir a la infancia y su relación con la familia, con el Estado y con la comunidad.